20 julio 2015

3:16

En esta cama no se puede ser libre.
En esta cama no se puede dormir ni respirar.
No se puede decir te quiero en esta cama.
Cambio la postura, convulsiono, me giro, salgo ardiendo.
Veo ¿hormigas?
Me enciendo un cigarrillo en la ventana. Cierro los ojos. Me lo fumo.
Hay diez tús que apenas me importan a quienes hablo con la voz ya ronca.
¿Por qué?
Hay gente que habla como si no importase nada
como si no importase nada. Hay ruidos.
Ruido de motores de cosas siempre. Y de más cosas.
Hay dos gatos detrás de la puerta pero yo estoy sola, sola de odiar sin fuerzas, sola de dolerse.
Hay un cuarto en llamas.
Y no me quedan drogas.

En esta cama no se puede ser.